Editorial

Rebelión de diputados contra el Gobernador Rogelio Ortega

A decir verdad los coordinadores de las fracciones parlamentarias de los partidos de la Revolución Democrática y Revolucionario Institucional del Congreso Local y el coordinador de campaña del candidato del Movimiento Ciudadano, han emplazado al gobernador de Guerrero a sacar las campañas para renovar gobernador, diputados locales y federales y presidentes municipales.

El diputado federal Ricardo Mejía Berdeja quien sentenció que “Rogelio Ortega se ha salido del clóset Chuchista”, al cuestionar su participación en el arranque de campaña del candidato al gobierno de Michoacán, Silvano Aureoles. Al evento realizado en Zitácuaro acudió la dirigencia nacional perredista; también estuvo la candidata a gobernar Guerrero por el PRD, Beatriz Mojica Morga.

El presidente de la Comisión de Gobierno del Congreso local, Bernardo Ortega, habría anunciado que será analizada la permanencia de Rogelio Ortega como gobernador sustituto, una vez que el 26 de abril próximo concluye la licencia concedida al gobernador Constitucional, Ángel Heladio Aguirre Rivero.

“Una verdadera sorpresa causó su presencia en Michoacán, porque ilusamente habíamos creído en el compromiso que hizo de que ejercería un gobierno ciudadano.

Sí…aquí mismo, en esta misma tribuna, al tomar protesta de su responsabilidad como gobernador sustituto, habló y habló que dé estaba consciente que asumía el cargo a raíz de los trágicos acontecimientos ocurridos en Iguala.

Habrá algún diputado queda bien que diga: “el gobernador sólo ejerció sus derechos políticos, en días inhábiles, lo ampara la Constitución”. Y tendrá razón a medias. ¡Pero la razón moral nunca!. Lo que nadie podrá negar, es que el gobernador se ausentó del estado de manera irresponsable para hacer proselitismo político, cuando el estado vive una severa crisis política, social y económica.

Con razón, desde el primer día, el gobernador no puede sentarse con los padres de los normalistas desaparecidos…simplemente porque perdió desde el primer instante la autoridad moral que tenía para sentarse con ellos.

La asunción de Rogelio Ortega a la gubernatura estuvo marcada por los trágicos acontecimientos ocurridos en Iguala, por lo que está obligado a guardar una posición prudente.