Por Juan José Romero/Notymas
Chilpancingo, Gro.– Decenas de familiares
de los pacientes internados se les prohibió el acceso en el hospital general
“Raymundo Abarca Alarcón” por órdenes de directivos.
La disposición tomó por
sorpresa a decenas de ciudadanos, lo que generó irritación, descontento e
impotencia.
Algunos de ellos, se
encontraban sentados en el piso, mientras que decenas de personas sufrieron las
inclemencias del sol durante todo el día para conocer noticias de sus
familiares.
Y aunque pidieron ingresar al
patio central del nosocomio, en el cual se colocaron bancas y además cuenta con
espacios de sombra, los elementos de seguridad les prohibieron el paso.
Únicamente se permitió el
acceso a familiares de pacientes que eran requeridos por el personal médico.
Para el trámite de altas y
compra de medicamentos que no están disponibles en la Farmacia del hospital,
los familiares fueron avisados a través de un megáfono en el acceso principal y
en algunos casos a gritos.
El malestar de los ciudadanos
arreció cuando los policías de guardia informaron que no podían ingresar con
alimentos, y por ende tenían que dejar sus bolsas en la entrada para poder
ingresar.
Rafael Lucena Álvarez, uno de
los familiares a quienes no se le permitió el acceso, señalo que tiene una
sobrina internada “hace como una semana no estaba así esto, está cambiando
mucho, el problema es que a veces uno lleva medicina para las pacientes y
tampoco llaman, uno les dice den chance, porque no estaba así esto antes, y nos
dicen háblele usted con su celular, si revisan la bolsa para que no pase uno
cosas como le va hablar”, explico.
Denunciaron que quienes
acudieron a consulta y a practicarse estudios de laboratorio tuvieron que
regalarlos, otras los dejaron en resguardo del personal de seguridad y al salir
los tomaron.
Los elementos de seguridad del
nosocomio revisaron mochilas y bolsas de mano, así como físicamente a las
personas que ingresaron a consulta; algunas derechohabientes denunciaron abusos
de los elementos al revisarlas.
“Nomas está dejando pasara una
sola persona de cada paciente y mientras nosotros tenemos que estar aquí en el
sol…..nos dijeron que iban a venir a avisar hasta acá afuera pero no….por
ejemplo los niños, tenemos niños y hora sí que ellos también están en el rayo
del sol”, señalo, Amado de Jesús Alonso, familiar de un paciente internado,
quien improvisó una sombra con cartón para proteger del sol a su familia.
Ambas personas hicieron un
llamado a los directivos del personal para que rectificaron su decisión y les
permitieran ingresar al patio del central para protegerse del sol.
Mientras se realizaban las
entrevistas un grupo de personas se refugió bajo la sombra de un árbol que se
ubica a un costado del acceso al nosocomio.
Mientras otros pasaron horas sentados
en el piso en espera de ser llamados para pasar a ver de uno en uno a sus
familiares.
Cabe mencionar que el proyecto
original de construcción de este hospital, contemplaba un albergue para
familiares y pacientes de escasos recursos, donde esperarían a sus pacientes.
De igual forma, contaría con
mobiliario totalmente nuevo, camas, sanitarios, aire acondicionado, archivero
con llave para guardar sus pertenencias y boiler para que en época de frío los
usuarios tengan agua caliente.
En su
momento, a través de un comunicado oficial el gobierno del estado
informó: “Con este inmueble, el gobierno del estado apoyará a los familiares de
los enfermos, porque tendrán un lugar digno, confortable y seguro donde
descansar y asearse mientras se dedican a velar por sus seres queridos que son
atendidos en el Hospital General Raymundo Abarca Alarcón”.
Decenas de personas, entre padres de familia, ancianitos y
niños duermen en la intemperie y sin ninguna protección por la determinación
nefasta del director del Hospital General “Raymundo Abarca Alarcón”.
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