*Ecologistas prevén que en dos
años los ríos y manantiales empiecen a secarse, y, miles de animales habrán
muerto
*Permisos del Gobierno Federal
amparan a los grupos de talamontes que, para el año 2020 exterminarán más de
mil hectáreas de bosque
Por Jonathan Cuevas/API
Chilpancingo, Gro.- En un
juego de intereses millonarios; actores políticos, falsos ejidatarios, un
diputado y grupos dedicados a la siembra y tráfico de drogas, están depredando
el bosque de Chichihualco desde el año 2008 con permisos de dependencias
federales, acabando así con ríos, la flora y fauna de esta parte serrana del
Estado de Guerrero.
Desde 2011 a la fecha, talamontes
disfrazados de ejidatarios y bajo el cobijo de las autoridades federales y
estatales, han deforestado 19 mil 437 metros cúbicos por medio de la tala de
árboles. Esto es, 540.13 hectáreas de tierra, lo que equivale aproximadamente a
una zona territorial similar a la del pueblo de Chichihualco.
Para 2020, la devastación en
la zona sería terrible, según consideran algunos ambientalistas, pues se
estarían exterminando más de mil hectáreas de bosque, así como la fauna y
mantos acuíferos que ahí existen todavía, y que en muchos de los casos
alimentan de agua a diversos pueblos del municipio de Leonardo Bravo y su
cabecera municipal, e incluso a Chilpancingo, la capital del Estado.
Las afectaciones que han
dejado los talamontes aquí, han provocado devastaciones al encontrase con
fenómenos naturales extraordinarios, como la tormenta “Manuel” y el huracán
“Ingrid” ocurridos en 2013, cuando gran parte del Estado quedó devastada.
En el municipio de Leonardo Bravo, también sufrieron severas afectaciones varias comunidades conjuntas al río Huacapa que baja desde la sierra, cruza por Chilpancingo y dos municipios más, cuya represa, el Cerrito Rico, se desbordó en aquel mes de septiembre del año mencionado.
En el municipio de Leonardo Bravo, también sufrieron severas afectaciones varias comunidades conjuntas al río Huacapa que baja desde la sierra, cruza por Chilpancingo y dos municipios más, cuya represa, el Cerrito Rico, se desbordó en aquel mes de septiembre del año mencionado.
Los permisos…
En el año 2011, los
ejidatarios de Chichihualco realizaron una asamblea donde estuvo al frente el
Comisariado Pedro Adame Bizoso. En ese momento se aceptó que se explotara la
Sierra de Chichihualco cortando 907 metros cúbicos. La madera sería únicamente
para el arreglo de la oficina ejidal.
Tras la asamblea se levantó el
acta correspondiente y se entregaron copias a la Secretaría del Medio Ambiente
y Recursos Naturales (Semarnat) y la Procuraduría Federal de Protección
Ambiental y otras dependencias. Sin embargo, enseguida el Gobierno Federal a
través de las dependencias facultadas, expidió un permiso para la explotación
de esa parte de la Sierra, durante 10 años.
El principal responsable de
otorgar este permiso fue el entonces delegado de la Semarnat en Guerrero,
Daniel Vega Villanueva.
Desde entonces se dio un
rompimiento entre ejidatarios debido a que ese no había sido el acuerdo de la
asamblea celebrada a principios del 2011, sobre todo porque 10 años de
deforestación en la zona, podrían traer un fuerte problema ambiental con el
exterminio no solo del bosque, sino de la flora, fauna y mantos acuíferos.
Hoy, en dicho permiso está
adjunta una lista de los ejidatarios que autorizaron la solicitud del mismo,
siendo únicamente 79 ejidatarios lo avalan, cuando había en realidad más de 500
registrados. Es decir, el supuesto acuerdo de la asamblea presentado por el
entonces Comisariado al Gobierno Federal, no debería tener validez oficial.
Además, según algunos
ejidatarios consultados por este medio informativo, dentro de esos 79 votos a
favor, había varias firmas falsificadas.
No obstante, las dependencias
federales brindaron fácilmente el permiso a la m esa directiva de aquel
entonces, lo que provocó el descontento de organizaciones ambientales,
ejidatarios, campesinos y los propios pobladores de la cabecera municipal de
Leonardo Bravo (Chichihualco), al ser notorio el daño y afectaciones que la
deforestación traería consigo y que, para este 2015 ya se está resintiendo.
Ante ello, las partes
inconformes y varias organizaciones han gestionado ante el Gobierno Federal y
Estatal la cancelación de dicho permiso, a 4 años de iniciada la deforestación
con este permiso, aunque en 1998 había sido expedido ya otro permiso por Pablo
González Villalba y, antes de esto se talaba de forma clandestina.
Es decir, los intereses en la
explotación y deforestación de esta zona datan desde al menos 17 años atrás y,
desde 1998 las autoridades han cobijado a los responsables de un ecocidio.
Un ejidatario que accedió a
dialogar con este medio informativo, expuso: “En el ejido hay un permiso que
dio la Semarnat para los ejidatarios que desde 2011 a la fecha se está
explotando. Por lo que nosotros estamos preocupados, es que se está talando
demasiado la Sierra. Nosotros pedimos a las autoridades que cancelen este
permiso. Nosotros tenemos pruebas de cómo está mal hecho todo, hay anomalías”.
La zona exterminada…
En 2011 fue otorgado el
permiso de tala al comisariado Pedro Adame Bizoso, pero éste solo siguió al
frente del Comisariado Ejidal durante tres meses. En 2012 hubo un cambio, quedando
en el puesto Faustino Bizoso Duque y, como Secretario, Alfonso Duque Marino,
quienes explotaron de esa fecha al 2014, dejando el negocio entre familia, de
una administración a otra.
“Son personas que sin
escrúpulos han seguido talando la Sierra. Han cortado árboles cerca del agua y
no han cumplido ningún requisito de los que marca el permiso de la Semarnat,
por ejemplo tener un vivero, reforestar, cuidar los incendios, hacer brechas
guarda-raya. Por eso queremos que intervengan las autoridades porque cortan
donde no deben cortar”, se quejó otro de los ejidatarios.
Más aún, dijo que en el pueblo
de Chichihualco ahora se vende agua en tinacos, lo que resulta ser una prueba
de que se está escaseando el agua en la zona, consecuencia de la deforestación.
Un par de años atrás, los ciudadanos de Leonardo Bravo no tenían necesidad de
comprar el líquido.
Además, en esa zona hay
constantes deslaves debido a los cortes que han hecho los talamontes; el río ha
salido de su cauce, mientras que la calor también ha aumentado demasiado.
“También la fauna y la flora
va desapareciendo. Las guaridas de los animales son destruidas por los
incendios provocados por ellos mismos (los depredadores del bosque) para poder
seguir cortando madera. Los animales que sobreviven, huyen de esa zona”,
advierte otro campesino.
Desde esa parte serrana bajan
los ríos Huacapa y Michiapa, mismos que han disminuido sus niveles de agua. Uno
de los pueblos más afectados es Tepozonalco.
La zona depredada colinda con
Omiltemi y Las Cuevitas. El área cortada es conocida como “El Faisán”, pero
también otros puntos como: Agua de las Tablas, Las Gallinitas, Filo Trozado,
Chicahual Verde y más, que son puntos donde emana el agua a través de
manantiales. La depredación está en casi toda la franja serrana de Leonardo
Bravo, que es la parte baja de la Sierra de esta entidad.
Tan solo con el último
permiso, a partir de 2011 a la fecha, se han talado 540.13 hectáreas de bosque
que corresponden a 19 mil 565 metros cúbicos explotados. Esto es para
organizaciones ambientalistas, un daño ambiental “terrible” e irreversible, ya
que los taladores y las empresas involucradas, no han reforestado nada. Es para
el pueblo de Chichihualco un “ecocidio” que están haciendo algunos de sus
paisanos y personajes forános, pero con mucho poder.
Los campesinos han denunciado
que ni Profepa, Semaren o Semarnat que son dependencias federales y estatales,
han hecho algo al respecto o, al menos han exigido que se reforeste la zona
donde se han cortado pinos Ayacahuite, Teocote, Herrerai, Espátula,
Pseudostrobus, Pringlei, Ocarpa y Encino Quercus.
Tan solo en 2011 se
destruyeron 4 mil 143.058 metros cúbicos en 155.72 hectáreas de bosque; en el
año 2012 fueron explotados 4 mil 226.916 metros cúbicos en 119.28 hectáreas;
para 2013 la deforestación fue en 4 mil 075.684 metros cúbicos, distribuidos en
85.50 hectáreas, y, para 2014 hubo una devastación de 3 mil 203.805 metros
cúbicos, en 92.27 hectáreas.
En 2015 se prevé terminar
oficialmente con 3 mil 788.102 metros cúbicos de bosque en 87.36 hectáreas de
tierra. El avance es del 50 por ciento actualmente. Sin embargo, para 2020 que
es cuando fenece el permiso de tala en la zona, habría consecuencias terribles
por este atentado contra la naturaleza, según los ambientalistas. Se estaría
acabando con más de mil 100 hectáreas de bosque, que afectaría directamente a
los ríos, flora, fauna e incluso los habitantes de los pueblos cercanos y hasta
la capital del Estado.
Y es que una zona colindante
con la parte deforestada es Omiltemi, que es uno de los abastos de agua potable
de Chilpancingo. Además, el río Huacapa que cruza por toda la ciudad capital y
tiene una represa debilitada desde 2013, podrían verse severamente afectados
con una posible sequía, o más desbordamientos.
Los interesados…
Los ex comisariados o miembros
de los comités ejidales no han sido los únicos beneficiados, según cuentan los
ciudadanos de Chichihualco. Tampoco son los 2 millones y medio de pesos
anuales, las únicas ganancias.
El diputado local por el
Partido Movimiento Ciudadano (PMC), oriundo de la Costa Grande del Estado y
candidato a diputado federal en la pasada elección, Evencio Romero Sotelo es
uno de los principales beneficiados e interesados en que se siga depredando la
sierra de Leonardo Bravo. Así lo identifican ciudadanos, campesinos,
ambientalistas y ejidatarios inconformes con la tala.
El característico legislador
es además líder de la Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos del
Estado de Guerrero (LCASC); organización que ha utilizado para arropar y maniobrar
a favor de los ejidatarios de Chichihualco que se han dedicado a la tala. Así
lo denunciaron las partes inconformes.
“Los más beneficiados son
Faustino Bizoso Duque, ex comisariado en 2012-2014; Alfonso Duque Marino,
maestro y pastor cristiano, Secretario del Comisariado 2012-2014; el tesorero,
Florencio Morales Torres y Candido Ramírez Salvador, que estaba al frente del
Consejo de Vigilancia”, señalaron.
“Cada año están cortando más
de 4 mil metros cúbicos de madera que se los pagan en 700 pesos el metro en
rollo. Si se multiplica por los 12 meses del año, viene dando como 2 millones y
medio de pesos”, agregan los campesinos.
Añaden que en 1993, Alfonso
Duque Marino ya había sido comisariado y, desde entonces maneja a su antojo las
asambleas con compra de votos, falsificación de firmas, alteración de
documentos y amenazas, a fin de imponer a su gente cercana en el comisariado
cada vez que hay cambios, es decir, cada dos años.
También reprochan: “no es
posible que en 85 hectáreas vayan a sacar 4 mil 075 metros cúbicos”.
Y en la denuncia, afirman: “A
ellos los apoya Evencio Romero Sotelo. Él supuestamente defiende a los
ejidatarios desde la Liga Agraria. Trabaja con el Registro Agrario nacional
(RAN) y hace favores de cambiar los padrones, sacando a las personas que les
estorban, para que sigan trabajando”.
Y afirman que dentro de los
interesados en la zona, también está el calentano Misael Medrano Baza, ex
dirigente estatal del PRD y ex subsecretario de Asuntos Políticos del Gobierno
de Ángel Aguirre Rivero.
De Evencio afirman: “se ha
llevado muy de cerca con los comisariados que han fungido. Incluso en una
ocasión en asamblea del cambio de Comisariado Ejidal, se presentó con una carta
poder para poder votar, lo que está prohibido. Hasta este momento él sigue
metiendo las manos para rasurar los padrones y decidir quién va a dirigir el
ejido”.
También afirman que en las
asambleas, cobijado por Evencio Romero, el ex comisariado Faustino Bizoso Duque
y Alfonso Duque Marino, han amenazado a las gentes que se quieren oponer a los
proyectos de tala e incluso les ponen a la gente en contra, catalogándolos como
traidores.
La ocasión en que Evencio
Romero se presentó a votar con carta poder expedida por el RAN, fue cuando
estaba al frente del consejo Gilberto Jiménez Alonso, eligiéndose en esa
ocasión a Enrique Pérez Morales quien suplió a Faustino Bizoso Duque.
Incluso los ejidatarios
afirmaron que en aquella ocasión, el ahora legislador de MC les advirtió: “No
se preocupen, el comisariado va a ser Enrique (Pérez Morales). Saben que yo
quito y pongo y no se me dificulta nada”. Las palabras habrían sido expuestas
públicamente en noviembre del 2014, cuando Evencio estaba en su curul en la 60
legislatura local.
Algunos de los actos de
corrupción que han detectado de Evencio Romero, afirman que está la alteración
del padrón de ejidatarios a finales del año pasado, previo a la asamblea donde
se eligió al último comisariado que resultó ser nuevamente, gente de Alfonso
Bizoso y su familia.
En el caso de Alfonso, habría
sido explusado como ejidatario después de su administración de 1998, hecho que
está registrado en el número de folio del RAN, 12RA00000006. Junto con él
habrían sido expulsados tres más de sus incondicionales. Sin embargo, de un
momento a otro volvió a aparecer en el padrón de ejidatarios, “usurpando
funciones”, según dicen otros ejidatarios.
Pero para Octubre del año pasado, el padrón fue rasurado nuevamente para incluir a la gente de Alfonso y Faustino que ha sido dada de baja en los últimos años y, con ello poder imponer al nuevo comisariado que, les permitirá continuar con la tala.
Pero para Octubre del año pasado, el padrón fue rasurado nuevamente para incluir a la gente de Alfonso y Faustino que ha sido dada de baja en los últimos años y, con ello poder imponer al nuevo comisariado que, les permitirá continuar con la tala.
Para poder modificar el
padrón, según indican los ejidatarios y ciudadanos, se tuvo que pedir apoyo de
Evencio Romero Sotelo, quien movió influencias en el RAN para alterar, cobrando
por este favor 100 mil pesos que, se habría distribuido con la registradora
agraria.
El principal negocio…
De todo esto, se logró saber
que la depredación de la sierra significa un millonario negocio para las
familias de Alfonso Duque y Faustino Bizoso, e incluso para el diputado Evencio
Romero Sotelo, a costa del daño ambiental que están provocando al municipio de
Leonardo Bravo.
Pero más allá, hay otro problema que ninguna autoridad ha querido atender y, con el que los pobladores, campesinos, ejidatarios y ambientalistas no pueden luchar, que es la siembra de enervantes.
De acuerdo a testimonios recabados bajo el beneficio del anonimato, varias de las hectáreas deforestadas son quemadas al final para dejar un terreno libre y apto para la siembra de amapola y marihuana.
Pero más allá, hay otro problema que ninguna autoridad ha querido atender y, con el que los pobladores, campesinos, ejidatarios y ambientalistas no pueden luchar, que es la siembra de enervantes.
De acuerdo a testimonios recabados bajo el beneficio del anonimato, varias de las hectáreas deforestadas son quemadas al final para dejar un terreno libre y apto para la siembra de amapola y marihuana.
Aunque no existen documentos
oficiales al respecto, los habitantes de la cabecera municipal y pueblos
vecinos, son testigos de que luego de la tala y quema de los bosques, las
tierras son rentadas a grupos dedicados a la siembra y tráfico de drogas, lo
que significa un negocio redondo en el cual los intereses económicos serían
exorbitantes.
Por esta razón las zonas ya
taladas no vuelven a ser reforestadas, pues de esta forma el negocio solo
quedaría en el corte de pinos y encinos.
El gobierno Estatal y Federal
por sui parte, se han negado a hacer frente a esta situación, aunque en el caso
del Estado, se ha reconocido que en Chichihualco se está cometiendo un
“ecocidio”; pues así lo reconoció el gobernador Ángel Aguirre Rivero ante los
ejidatarios inconformes, antes de solicitar licencia al cargo. A pesar de sus
palabras, nunca hizo algo al respecto.
Represalias…
La lucha que han llevado desde
hace más de 17 años las organizaciones defensoras del medio ambiente,
ciudadanos de Leonardo Bravo, campesinos y ejidatarios, ha tenido ya
consecuencias.
En Mayo del 2012, un grupo de ciudadanos subió a la zona deforestada para interrumpir los trabajos de tala. Luego de una fuerte discusión que casi terminó en enfrentamiento, los ciudadanos organizados de la cabecera municipal (Chichihualco) decidieron decomisar moto-sierras y las llaves de los vehículos que se utilizaban para transportar la madera.
En Mayo del 2012, un grupo de ciudadanos subió a la zona deforestada para interrumpir los trabajos de tala. Luego de una fuerte discusión que casi terminó en enfrentamiento, los ciudadanos organizados de la cabecera municipal (Chichihualco) decidieron decomisar moto-sierras y las llaves de los vehículos que se utilizaban para transportar la madera.
Esto provocó que días después,
las personas que se pusieron al frente del movimiento en defensa de los bosques,
fueran aprehendidos por la entonces Procuraduría General de Justicia del Estado
(PGJE), aunque lograron salir gracias a acuerdos políticos establecidos con el
gobierno de Ángel Aguirre.
Sin embargo, durante ese
tiempo, nueve de los opositores a la tala fueron perseguidos al ser acusados de
robo por las llaves de vehículos y moto-sierras decomisadas.
No obstante, continuaron la
lucha y, en 2014 volvieron a parar los trabajos de los taladores, aunque en
realidad no han podido hacer nada al respecto debido al permiso con el que
cuentan los primos-hermanos Alfonso y Faustino, sobre todo por el cobijo de
Evencio Romero Sotelo.
Los ejidatarios opositores,
afirman que uno de los delitos que se han cometido en este proceso es la
usurpación de funciones, pues los principales operadores de este negocio han
sido dados de baja como ejidatarios, pero siguen utilizando al ejido como si
fuera un predio particular. (Agencia Periodística de Investigación)
En un juego de intereses
millonarios; actores políticos, falsos ejidatarios, un diputado y grupos
dedicados a la siembra y tráfico de drogas, están depredando los bosque de la
Sierra, con permisos de dependencias federales, acabando así con ríos, la flora
y fauna.
Para
2020, la devastación en la zona sería terrible, según consideran algunos
ambientalistas, pues se estarían exterminando más de mil hectáreas de bosque,
así como la fauna y mantos acuíferos que ahí existen todavía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario