LECTURA POLÍTICA
Noé Mondragón Norato
El proceso de entrega-recepción de las alcaldías fue ciertamente,
atípico. No solo porque ocurrieron eventos que nunca se habían dado, sino por
las señales políticas enviadas a través de ellos. Es cuestión de percibirlas
con mayor amplitud para ajustarlas al contexto.
VIOLENCIA Y SEÑALES.- En casi la mayoría de las alcaldías, el proceso
de entrega-recepción ocurrió sin sobresaltos. Pero en algunas imperó la
violencia. Y en otras, se enviaron mensajes políticos elocuentes. 1.- Uno de
los prietitos en el arroz, fue la alcaldía de Atenango del Río. Ahí, el sábado
29 por la noche, un grupo de hombres armados atacó dicho inmueble. Dispararon
contra Israel Cantonera García, quien entraría en funciones como director de
Tránsito Municipal. También contra Víctor Lupia Cejan, quien sería el director
de la Unidad Deportiva. Ambos murieron. El alcalde del PT, Andrés Guevara
Cárdenas, denunció los hechos, pero no explicó los motivos del ataque.
Y el vocero, Roberto Álvarez Heredia, confirmó los hechos. Pero no
movió un solo dedo al respecto. 2.- En la alcaldía de Cochoapa el Grande, el
alcalde electo de la coalición Por México al Frente, Daniel Esteban González,
no apareció desde que fue plagiado el pasado 2 de septiembre. La síndica
Guillerma Prado Gálvez, tomó protesta como encargada de despacho. El punto es
que la Fiscalía General del Estado (FGE) no ha podido dar con el paradero de
Daniel. Y por eso, los policías comunitarios agrupados en la UPOEG, mantienen
un cerco sobre el municipio de Tlapa desde el pasado 14 de septiembre, alegando
justamente eso: la ausencia de seguridad y el incremento de varios delitos como
el secuestro, las extorsiones y los asesinatos. La autoridad estatal quedó ampliamente
rebasada. Y todo lo anterior, es apenas un aviso de lo que se espera con las
nuevas autoridades municipales en la región Montaña. 3.- Las señales políticas
por otro lado, marcaron algunas preferencias. En Chilpancingo, el gobernador
Astudillo, acudió a la ceremonia del cambio de poderes municipal. Llegó como
alcalde su ex cuadro político, Antonio Gaspar Beltrán. Quizá por esa razón, se
entienda que la relación política -a diferencia de la que tuvo con el saliente
priísta, Marco Antonio Leyva Mena-, será de mayor entendimiento. Y
coyunturalmente, el gobernador arrancó el viernes pasado con un programa de
bacheo que cubrirá 4 mil hoyancos de las calles de la capital. Aunque en
realidad sean como 20 mil los hoyos que existen por todas las calles de Chilpancingo.
El punto fue elocuente: ese programa no se lo podían endosar ni el alcalde
saliente ni el entrante. El gobernador quiso dejar bien marcado ese mensaje.
4.- En Acapulco, la alcaldesa del Morena, Adela Román Ocampo, tomó protesta sin
la presencia del mandatario estatal.
A pesar de las reuniones previas que sostuvo con él, al final de
cuentas se impusieron las diferencias partidistas. Y un factor más: al suntuoso
evento celebrado en uno de los salones del Mundo Imperial, asistió el titular
de la Junta de Coordinación Política del Congreso local, Pablo Amílcar Sandoval
Ballesteros. Un adversario político declarado del propio Astudillo. 5.- El
operativo policiaco del pasado martes 25 que desarmó a toda la policía
preventiva municipal de Acapulco y detuvo a dos agentes de la policía vial y de
tránsito, tuvo como finalidad dos cosas: no dejar ir en blanco al edil
saliente, el perredista Evodio Velázquez Aguirre, a fin de que su tribu Nueva
Mayoría, no llegue a la dirigencia estatal del PRD. Y por eso salió a relucir
en el último minuto, el asunto de las 342 armas perdidas.
Y, en segundo lugar, establecer un perímetro de acceso “limpio” entre
el gobierno estatal y el municipal entrante. Es decir, que se responsabilice lo
menos posible al gobierno estatal en los hechos criminales y de inseguridad que
han contaminado recurrentemente a ese puerto turístico. Lo peor es que la
alcaldesa Román Ocampo, ya se deslindó de ellos en su primera declaración como
autoridad municipal electa. Y aseguro que, de acuerdo con la Ley, corresponde a
la autoridad federal y estatal resolverlos. Sacó al municipio de las tareas en
materia de seguridad. Y con ello, se anticipa el estilo poco ortodoxo en la
forma de gobernar que se espera de ella.
HOJEADAS DE PÁGINAS…Y como parte de la violencia que no cesa, en las
horas previas a la toma de protesta del nuevo alcalde de Taxco, Marcos Efrén
Parra Gómez -el viernes 28-, fue asesinado el locutor de Radio y Televisión de
Guerrero (RTG), Arturo Porcayo Aguiluz, en un taller mecánico del barrio Los
Jales de esa ciudad platera. A este crimen se suma el de Francisco Pacheco
Beltrán, ocurrido en esa misma ciudad, pero en abril de 2016. Al evento de toma
de protesta de Parra Gómez, acudió el gobernador Astudillo, quien no fijó
postura sobre ese crimen.
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